Las bebidas de carbohidratos en polvo son una fuente esencial de energía para entrenamientos de larga duración. Sin embargo, es importante diferenciar entre las fórmulas convencionales y las bebidas con carbohidratos naturales y sin añadidos, ya que su impacto en el rendimiento y la salud es muy distinto.
Las bebidas de carbohidratos convencionales suelen estar formuladas con glucosa, palatinosa, isomaltulosa o maltodextrina refinada. Además, contienen colorantes, edulcorantes artificiales, conservantes y aromas. Estas combinaciones proporcionan energía rápida, pero también pueden generar picos de glucosa, afectar la microbiota intestinal y provocar fatiga temprana. Aun así, suelen ser una opción más económica.
Por otro lado, las bebidas de carbohidratos naturales utilizan fuentes como maltodextrina con menos de 50.000 ppm y fructosa, sin conservantes, edulcorantes artificiales ni aromas añadidos. Su absorción es más progresiva y estable, lo que favorece una energía sostenida, una digestión más ligera y un mejor equilibrio intestinal.
En resumen, las bebidas con carbohidratos naturales y sin añadidos permiten mantener un aporte energético estable y saludable, evitando los problemas digestivos y la dependencia de sabores artificiales que pueden generar las versiones convencionales.